Buena noticia
Evangelio significa en griego: buena noticia.
Las noticias importantes, sobre todo cuando son buenas, cambian nuestra perspectiva de la realidad. Pero, al leer el evangelio chocamos con relatos exraños, absurdos o impracticables.
Y es que el texto está cifrado y se precisa una clave para entenderlo.De hecho, lo confiesa abiertamente: «Por eso les hablo con parábolas; porque ellos viendo no miran y oyendo no escuchan, ni entienden». (Mateo 13, 13).
El secreto, la clave, procede de contemplar la realidad despiertos. Nosotros hemos despertado gracias a la línea espiritual de Antonio Blay y, revisando los escritos con esta mirada, percibimos en ellos una luz asombrosa, que aclara muchas de las dudas que la interpretación tradicional de la Iglesia nos había generado.
Pero además, el Evangelio resulta ser un Manual de Trabajo Espiritual con indicaciones muy precisas y útiles para aplicar a la vida cotidiana y elevar nuestra conciencia a niveles superiores. Estas parábolas, milagros y recomendaciones son mensajes clarísimos y adecuados para superar los obstáculos que nos encontramos en el camino.